Cómo concentrarnos en la era de la distracción

En un mundo tan lleno de distracciones, en donde la multitarea muchas veces se celebra como una virtud, existe un concepto que va a contracorriente: el Deep Work. Descubrí este concepto en 2022, en un momento que sentía que mis días se evaporaban, y cambió mi forma de estudiar/trabajar y de entender el valor de mi tiempo.

En esta publicación veremos qué es exactamente el trabajo profundo, por qué es tan valioso en la economía actual, y lo más importante: cómo podemos implementarlo en nuestras vidas profesionales.

Parte 1: Qué es el trabajo profundo y por qué importa

Dos conceptos clave

Primero tenemos que diferenciar dos conceptos.

Cuando hablamos de trabajo profundo nos referimos a actividades profesionales desempeñadas con una concentración sin distracciones que empujan tus capacidades cognitivas más allá de su límite.

Por el contrario, el trabajo superficial son tareas no cognitivas, normalmente desempeñadas mientras estamos distraídos. Estos esfuerzos son más sencillos de replicar y tienden a no aportar demasiado valor nuevo.

Para Cal Newport, autor del libro Deep Work, el trabajo profundo es valioso, escaso y significativo (en términos de sentido).

Valor

En un mundo en constante cambio, las dos principales habilidades que podemos tener son:

  1. La habilidad de aprender rápido cosas difíciles.
  2. La habilidad de producir a un nivel de elite, en términos de calidad y velocidad.

Y básicamente estas dos habilidades dependen de poder realizar trabajo profundo.

Lo ideal sería poder enfocar toda nuestra atención en una habilidad que queremos mejorar y recibir retroalimentación sobre eso para poder seguir enfocando nuestra atención en lo que es más productivo.

La ciencia nos dice que para mejorar en una habilidad necesitamos desarrollar más mielina alrededor de las neuronas relevantes (relevantes para esa habilidad). Y la única forma de aislar a los circuitos neuronales relevantes para producir esa mielina es enfocándonos en esa tarea intensamente. Similar a cómo un músculo se fortalece con el entrenamiento focalizado.

Significado

Construir nuestra vida laboral alrededor del flow que produce el trabajo profundo puede darnos satisfacción, aunque sea un trabajo demandante.

Y sea la profesión en la que estemos, podemos crear significado de los esfuerzos diarios de nuestra vida profesional.

Para Cal Newport, lo que importa no es el trabajo que realicemos, ya que el significado proviene de la habilidad y apreciación del arte de la profesión. En ese sentido, dice que no es un buen consejo seguir nuestra pasión, pero sobre esto me gustaría hablar más adelante.

Para el trabajo en la economía del conocimiento es lo mismo. No necesitamos un trabajo extremadamente raro y/o perfecto que cumpla con miles de requisitos, sino un enfoque raro hacia el trabajo.

Parte 2: Cómo implementarlo

Encontrá tu filosofía

Cal define cuatro filosofías diferentes para incorporar el Deep Work a tu vida:

  1. Filosofía monástica: eliminar o reducir drásticamente las tareas superficiales y dedicarse casi exclusivamente al trabajo profundo.
  2. Filosofía bimodal: dividir tu tiempo en períodos de trabajo profundo y períodos normales.
  3. Filosofía rítmica: convertir el trabajo profundo en un hábito regular, estableciendo bloques diarios en tu agenda.
  4. Filosofía periodística: insertar sesiones de trabajo profundo donde sea posible.

Esta última es la que me sirve a mí, al menos en este momento de mi vida, y probablemente sea útil para la mayoría de personas que tengan un trabajo en relación de dependencia.

A veces la complicación no es encontrar un hueco en tu agenda, sino pasar a un estado de trabajo profundo en cualquier momento. Poder lograrlo requiere entrenamiento.

Creá rituales

Es conveniente crear rituales de trabajo profundo. No hay uno en particular que sea el mejor, pero algunas preguntas que ayudan a plasmarlo son:

  • ¿Dónde trabajarás y por cuánto tiempo?
  • ¿Cómo trabajarás una vez que empieces?
  • ¿Cómo “apoyarás” tu trabajo? Buscá elementos que te ayuden a mantener la concentración. En mi caso, por ejemplo, preparar un buen mate.

Aprendé a ser perezoso

  • Desconectar ayuda a tener mejores ideas: la ciencia ha demostrado que nuestro cerebro sigue trabajando en problemas complejos incluso cuando no estamos conscientemente pensando en ellos.
  • Desconectar recarga la energía necesaria para realizar trabajo profundo.

Esta es la parte que más me cuesta. Si también querés hacer cosas por fuera de tu horario laboral, probablemente tengas el mismo problema.

¿A vos también te cuesta desconectar? ¿O tenés el problema opuesto?

Lo que hago en este caso es intentar diferenciar tareas que requieren foco de las que no.

En teoría no podemos trabajar con foco intenso más de 3-4 horas diarias. Con lo cual esto te sirve para saber qué tipo de tareas podés continuar, dependiendo de tus niveles de energía y tiempo.

También es importante tener un ritual de desconexión. Aunque confieso que aún no lo puedo cumplir a rajatabla, cuando lo consigo noto que sufro menos desgaste mental y por ende me siento mejor.

Abrazá el aburrimiento

No debemos intentar llenar todo tiempo libre haciendo cosas, aunque la tentación sea fuerte.

No hay que tomar descansos de la distracción sino descansos del foco.

Si tenemos algún problema profesional, también podemos meditar productivamente, esto es, haciendo una tarea física como caminar o trotar y pensando exclusivamente en el problema.

Memorizar es una actividad que también incrementa nuestra capacidad de foco.

Controlá las redes sociales

Las redes rellenan todo hueco de tiempo haciendo que nuestra mente no descanse.

¿No te pasa que estás haciendo cola en un lugar, esperando a alguien, o simplemente tenés cinco minutos y agarrás el celular? A mí me pasa, pero ser consciente de ello te ayuda a empezar a cambiarlo. Y reduciendo su uso ya se pueden notar los beneficios.

En mi caso, suelo caer mucho en YouTube, incluso con contenido de horas de duración.

Es importante mantenernos organizados, ya que de otro modo van a aparecer actividades atractivas o algo tentador en el celular.

En realidad el autor propone no tener redes sociales, y si podés hacerlo quizá te cambie la vida. Pero como yo las uso, adapto esta información a mi situación.

Drená lo superficial

Tareas más triviales siempre son requeridas y necesarias. Esto no debe malinterpretarse.

No se trata de eliminarlas todas sino de asignarles tiempos específicos.

Un ejemplo que me funciona con los correos es fijar la pestaña del mail para que quede en pequeño al inicio. Además de ocupar menos lugar, no veo el número de correos sin abrir, lo que hace que me distraiga menos e intente ingresar de manera más consciente.

También podés crear grupos de pestañas en el navegador y ocultar las que molesten, dejando solo las que estés usando activamente.

Obviamente podemos estimar mal los tiempos o tener contratiempos. Esto es normal, y cuando pase debemos reorganizar nuestros tiempos.

Conclusión

La capacidad de realizar trabajo profundo parece ser una ventaja competitiva, nada fácil de lograr. No se trata solo de ser más productivo, sino de encontrar más significado y satisfacción en lo que hacemos.

Como dice Cal, “una vida profunda es una buena vida”. El Deep Work no es simplemente una técnica de productividad; es una filosofía que puede transformar nuestra relación con el trabajo y, por extensión, con nuestra vida.

¿Experimentaste el trabajo profundo? ¿Qué técnicas te funcionan a vos?

¡Suscribite para recibir mis nuevas publicaciones!

Dejame tu comentario